sábado, 10 de abril de 2021

CRESQUEREN I MORIREN ELS JARDINS│ CRECIERON Y MURIERON LOS JARDINES

 

Imagen Pinterest



CRESQUEREN I MORIREN ELS JARDINS

 

 

Esos ojos de frío no me mojan la espera de tu llama,

de las escamas pálidas de ansia.

Vicente Aleixandre

 

 

Sempre busquem l’amagatall de la llenya cremada del parrac

en el nus de l’ànsia dels dies que semblen interminables àmfores.

Res no és igual als ulls decapitats de l’ara.

T’esperí anys en aquest territori: cresqueren i moriren els jardins,

uns altres mai no tornaren a aquest sord silenci de misèries per a eixugar

les seues llàgrimes: àdhuc la remor de la compassió fereix l’ànima.

Sí, l’ull es pergué en la sedosa nuesa, càlida, de l’adolescència.

Aquell niu ara és ruïna davant dels meus ulls cansats.

Mai no tornares o et feres invisible al plat buit de la porta

amortallada: des de la flassada d’oblit, només puc agafar el fred

amb els seus dits d’agulles de cap mutilades, amb el seu desguàs de torxa

gastada, amb el seu murmuri d’estany contingut en les vísceres.

Mai no tornares, és cert. L’espera anà convertint-se en un fibló

indesxifrable, en una foguera de sinuosos miratges.

Al costat del crit, cresqué el dubte amb la seua pàl•lida geografia, la vigília,

i més, les distàncies en el país que amorosament ens fa mal.

.

. Poema d’ANDRÉ CRUCHAGA traduït en català per PERE BESSÓ

.

 

CRECIERON Y MURIERON LOS JARDINES

 

 

Esos ojos de frío no me mojan la espera de tu llama,

de las escamas pálidas de ansia.

Vicente Aleixandre

 

 

Siempre buscamos el escondrijo de la leña quemada del andrajo

en el nudo del ansia de los días que parecen interminables ánforas.

Nada es igual a los ojos decapitados del ahora.

Te esperé por años en este territorio: crecieron y murieron los jardines,

otros jamás volvieron a este sordo silencio de miserias para enjugar

sus lágrimas: hasta el rumor de la compasión hiere al alma.

Sí, el ojo se perdió en la sedosa desnudez, cálida, de la adolescencia.

Aquel nido ahora es ruina frente a mis ojos cansados.

Nunca volviste o te hiciste invisible en el plato vacío de la puerta

amortajada: desde la cobija de olvido, solo puedo asir el frío

con sus dedos de alfileres mutilados, con su desagüe de antorcha

gastada, con su murmullo de estanque contenido en las vísceras.

Nunca volviste, es cierto. La espera se fue convirtiendo en un aguijón

indescifrable, en una hoguera de sinuosos espejismos.

Junto al grito, creció la duda con su pálida geografía, la vigilia,

y más, las distancias en el país que nos duele amorosamente.

.

Del libro: ‘Fuego de llaves invisibles’, 2021

©André Cruchaga


RELLOTGE DE PELL DE LA RANERA│ RELOJ DE PIEL DEL ESTERTOR

 

Imagen Pinterest



RELLOTGE DE PELL DE LA RANERA

 

 

y mi cuerpo sin brazos y sin cabeza

y diremos nuestra última palabra.

José María Hinojosa

 

 

Ja no ens estranya aquest món mutilat, ni les raons de l’ombra

que es filtra en l’alambí de la respiració dels paladars

perduts al ressò d’una foguera carregada d’artèries trencades.

Sempre acaba per fer-nos mal el fruit del sexe de l’au missatgera,

les mirades de l’atzar dels espills penjant de l’entrecella de la set,

el sabor dels ponts penjants de les pol•lucions,

les fondalades en blanc i negre del cel, l’aire desvestit

d’una mirada feta en les intempèries del granit i el so corb

de l’alè en el punt de fruïció delirant de les flassades.

Tampoc no ens estranya la cabellera erràtil dels ossos, el cactus a l’ull,

ni la piga que deixen les esquerdes al rellotge de pell de les raneres.

Vivim enmig d’un torrent d’aigüe malaltes, en un país

que no convalece, en un país de silencis mortals.

Entre paciència i ebriesa, les paraules, per cert, no floreixen.

No floreix en el fang la rosa de jade de la llibertat.

.

. Poema d’ANDRÉ CRUCHAGA traduït en català per PERE BESSÓ

.

 

RELOJ DE PIEL DEL ESTERTOR

 

 

y mi cuerpo sin brazos y sin cabeza

y diremos nuestra última palabra.

José María Hinojosa

 

 

Ya no nos extraña este mundo mutilado, ni las razones de la sombra

que se filtra en el alambique de la respiración de los paladares

perdidos en el el eco de una hoguera cargada de arterias rotas.

Siempre acaba por dolernos el fruto del sexo del ave mensajera,

las miradas del azar de los espejos colgando del entrecejo de la sed,

el sabor de los puentes colgantes de las poluciones,

las hondonadas en blanco y negro del cielo, el aire desvestido

de una mirada hecha en las intemperies del granito y el sonido curvo

del aliento en el punto de fruición delirante de las cobijas.

Tampoco nos extraña la melena errátil de los huesos, el cactus en el ojo,

ni el lunar que dejan las grietas en el reloj de piel de los estertores.

Vivimos en medio de un torrente de aguas enfermas, en un país

que no convalece, en un país de silencios mortales.

Entre paciencia y ebriedad, las palabras por cierto, no florecen.

No florece en el barro, la rosa de jade de la libertad.

.

Del libro: ‘Fuego de llaves invisibles’, 2021

©André Cruchaga


viernes, 9 de abril de 2021

ZONA REMOTA DE LA SON│ ZONA REMOTA DEL SUEÑO

 

Imagen FB de Pere Bessó



ZONA REMOTA DE LA SON

 

 

Ya no duermes más, tus ojos se han abierto

sobre la noche sin dilatada reserva

tú conoces el canto de las gargantas

y su asfixia

Sabine Dewulf

 

 

Hem tornat a la zona remota dels ara sense cap reserva.

En un ressort de nostàlgies i silencis, l’ull allà, en la constel•lació

de la son compartida del vell llit de la fullaraca.

Des de l’anatomia insomne del matossar, la brevetat perduda

de les flassades i l’espetec dels porus vessats de l’asfíxia.

Ningú, per cert, no sap on para el calc de l’alè de les hores,

ni la nit supervivent a la gola,

ni les cames precipitades a la fondalada de la meua gola,

ni tan sols el càntir de la memòria del vent en la descaradura

desmesurada de la tinta esgarrifosa dels excessos.

Tota l’ànsia ens colpejà com un blues de mugrons dilatats.

Ara hi ha una quietud balba, un dol entendridor, un cos

tancat a les lliçons de la pols del desamor complit.

I, però, dins de la son, alguna cosa ens vigila com una veu

de terra en la carícia, com una ensopegada enmig de la tempesta.

.

. Poema d’ANDRÉ CRUCHAGA traduït en català per PERE BESSÓ

.

 

ZONA REMOTA DEL SUEÑO

 

 

Ya no duermes más, tus ojos se han abierto

sobre la noche sin dilatada reserva

tú conoces el canto de las gargantas

y su asfixia

Sabine Dewulf

 

 

Hemos vuelto a la zona remota de los ahoras sin reserva alguna.

En un resorte de nostalgias y silencios, el ojo allá, en la constelación

del sueño compartido del viejo lecho de la hojarasca.

Desde la anatomía insomne del matorral, la brevedad perdida

de las cobijas y el chasquido de los poros derramados de la asfixia.

Nadie, por cierto, sabe dónde queda el calco del aliento de las horas,

ni la noche sobreviviente en la garganta,

ni las piernas precipitadas en la hondonada de mi garganta,

ni siquiera el cántaro de la memoria del viento en la desfachatez

desmedida de la tinta estremecedora de los excesos.

Toda el ansia nos golpeó como un blues de pezones dilatados.

Ahora hay una quietud aterida, un duelo enternecedor, un cuerpo

cerrado a las lecciones del polvo del desamor cumplido.

Y sin embargo, dentro del sueño, algo nos vigila como una voz

de tierra en la caricia, como un tropiezo en medio de la tormenta.

.

Del libro: Fuego de llaves invisibles, 2021

©André Cruchaga


ANATOMIA D’ULLERES│ ANATOMÍA DE OJERAS

 

Imagen FB de Pere Bessó



ANATOMIA D’ULLERES

 

 

Hay amaneceres sin pájaros

que tiemblan de miedo

bajo el choque de las violencias de la vigilia,

Béatrice Marchal

 

 

Tot resulta estrany en l’anatomia de les ulleres que ronden

els ulls del matossar esbargit pel vent.

Estranys els centpeus de l’enderroc dels batecs en un malson

d’ocells arrecerats en sarcòfags de tile i enronquida cendra.

Al llit de fullaraca de xiprers, la por i la foscor

dels racons d’aquella lluna pobra que s’aboca a la vigília.

Res no és com l’assot negre de la nit perllongat els matins,

lenta escriptura i avançada podridura en l’aixella immunda

dels trens que es descarrilen sense veure el cel.

A la distància la fotografia dels somnis i la ciutat desesperada

en la boca, i la flama del metall abrasada al rellotge de pell de l’ofec.

Un és en l’inanimat una altra violència, una pluja de vísceres

entre les dents, un tió embalsamat amb sabor agredolç.

Davant dels dies que passen amb els seus forats, el paladar que peregrina

entre la rugositat de portes fosques i el desvari de les ales.

.

. Poema d’ANDRÉ CRUCHAGA traduït en català per PERE BESSÓ

.

 

ANATOMÍA DE OJERAS

 

 

Hay amaneceres sin pájaros

que tiemblan de miedo

bajo el choque de las violencias de la vigilia,

Béatrice Marchal

 

 

Todo resulta extraño en la anatomía de las ojeras que merodean

los ojos del matorral disperso por el viento.

Extraños los ciempiés del escombro de los pálpitos sobre una pesadilla

de pájaros arropados por sarcófagos de tile y enronquecida ceniza.

En el lecho de hojarasca de cipreses, el miedo y la oscuridad

de los rincones de aquella luna pobre que se asoma en la vigilia.

Nada es como el azote negro de la noche prolongado en las mañanas,

lenta escritura y avanzada podredumbre en la axila inmunda

de los trenes que se descarrilan sin ver el cielo.

A la distancia la fotografía de los sueños y la ciudad desesperada

en la boca, y la llama del metal abrasada al reloj de piel del ahogo.

Uno es en lo inanimado otra violencia, una lluvia de vísceras

entre los dientes, un tizón embalsamado con sabor agridulce.

Frente a los días que pasan con sus agujeros, el paladar que peregrina

entre la rugosidad de puertas oscuras y el desvarío de las alas.

.

Del libro: ‘Fuego de llaves invisibles’, 2021

©André Cruchaga