sábado, 29 de diciembre de 2018

PORT ERRANT

Imagen FB de Pere Bessó





PORT ERRANT




En la punta del pie el salto.
Parece la historia de alguien que fue y no volvió:
es allí adonde voy.
Clarice Lispector




Un gos llepa com un os el miratge de l’ombra: en la humitat negra del cel, la fulla dels infantaments en una gota de caus nues. Dormen clavats en la nit els insomnis, els embalums obscens furgant en els balcons: el vertigen arremolina les pol·lucions grogues de les bèsties. (De vegades ens mata la sotsobra de la nostàlgia i aquests fingiments i rancors acoltellats en els bordells enrunats de la mortalla de l’última paraula pronunciada.)

En la brasa de pluja de les explosions, la nuesa esmicolada en la golfa davant del rellotge: sempre fou imposible el teu cos, els buits del fred i les altes llunes, àuries del teu tòrax.

Poema d’ANDRÉ CRUCHAGA traduït en català per PERE BESSÓ





PUERTO ERRANTE




En la punta del pie el salto.
Parece la historia de alguien que fue y no volvió:
es allí adonde voy.
Clarice Lispector




Un perro lame como un hueso el espejismo de la sombra: en la humedad negra del cielo, la foja de los alumbramientos en una gota de desnudas madrigueras. Duermen clavados en la noche los insomnios, los bultos obscenos hurgando en los balcones: el vértigo arremolina las amarillas poluciones de las bestias. (A veces nos mata la zozobra de la nostalgia y esos fingimientos y rencores acuchillados en los burdeles desmoronados de la mortaja de la última palabra pronunciada.)

En la brasa de lluvia de las explosiones, la desnudez hecha añicos en el desván: frente al reloj siempre fue imposible tu cuerpo, los huecos del frío y las altas lunas, áureas de tu tórax.

Del libro: “Antípodas del espejo”, 2018
©André Cruchaga

viernes, 28 de diciembre de 2018

ESDEVINDRE

Imagen FB de Pere Bessó





ESDEVINDRE




in the damp sheets, every inch of your body
was like a pool of warm water…
Matthew Dickman




Així com el badall de l’ombra, la concavitat de les ulleres estesa com un cadàver. Passa de tot a través dels ulls: la ràfega onírica del solitari, l’espill atàvic de la mendicitat, el riu de cuques de llum dels teus braços. Sempre hi és, necessari, el coixí i la seua fulla de revelacions.

.Poema d’ANDRÉ CRUCHAGA traduït en català per PERE BESSÓ




ACONTECER




in the damp sheets, every inch of your body
was like a pool of warm water…
Matthew Dickman




Igual que el bostezo de la sombra, la concavidad de las ojeras tendida como un cadáver. Pasa de todo a través de los ojos: la ráfaga onírica de lo íngrimo, el espejo atávico de la mendicidad, el río de luciérnagas de tus brazos. Siempre está ahí, necesaria, la almohada y su foja de revelaciones.
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Del libro: “Antípodas del espejo”, 2018
©André Cruchaga

jueves, 27 de diciembre de 2018

EBRIETAT DERRUÏDA

Imagen FB de Pere Bessó





EBRIETAT DERRUÏDA




En la larva del foc desenterrat, l’erupció penitent de l’infern i les seues pestanyes de granit. Ja es tornà profund el clot de pols en la gola: la brasa reposa en la gota negra de les andròmines. (Mai no digueres que en els vasos del pit s’enverinarien les estrofes del bàtec. Tampoc que la intempèrie guardava cadàvers anònims i fosques crisàlides.)

Poema d’ANDRÉ CRUCHAGA traduït en català per PERE BESSÓ




EBRIEDAD DERRUIDA




En la larva del fuego desenterrado, el jiote penitente del infierno y sus pestañas de granito. Ya se hizo profunda la cárcava de polvo en la garganta: la brasa reposa en la gota negra de los cachivaches. (Nunca dijiste que en los vasos del pecho, se envenenarían las estrofas del pálpito. Tampoco que la intemperie guardaba cadáveres anónimos y oscuras crisálidas.)

miércoles, 26 de diciembre de 2018

DRENATGE

Imagen FB de Pere Bessò





DRENATGE




Descarnats els genets i descolorits els camins: mai el dia no donà per a tants colors, ni somnis que deixaren de ser drenats per depredadors. Les finestres furguen en els ulls cecs del cos fins a tocar l’inframón de cendra que hi ha en l’abisme ocular del temps.

Poema d’ANDRÉ CRUCHAGA traduït en català per PERE BESSÓ




DRENO




Descarnados los jinetes y descoloridos los caminos: nunca el día dio para tantos colores, ni sueños que dejaran de ser drenados por depredadores. Las ventanas hurgan en los ojos ciegos del cuerpo hasta tocar el inframundo de ceniza que existe en el abismo ocular del tiempo.

Del libro: “Antípodas del espejo”, 2018
©André Cruchaga

ESTAMPA

Imagen FB de Pere Bessó





ESTAMPA




El temps obri la seua roba de llaurador en l’enderroc dels abatiments. En tot hi ha un destí final: en aquell retaule tot just una lluerna d’espessors inefables. En l’arada de foc, la gota hipnotitzada del miratge.

Poema d’ANDRÉ CRUCHAGA traduït en català per PERE BESSÓ




ESTAMPA




El tiempo abre su ropa de labriego en el escombro de los abatimientos. En todo hay un destino final: en aquel retablo apenas un tragaluz de espesuras inefables. En el arado de fuego, la gota hipnotizada del espejismo.

Del libro: “Antípodas del espejo”, 2018
©André Cruchaga


lunes, 24 de diciembre de 2018

SENSE BRÚIUXOLA

Imagen FB de Pere Bessó





SENSE BRÚIUXOLA




Ara sagnen la seua dissortada nit les distàncies: la paraula enfebrada del sanglot obri el seu redó peix de crit. A la carn, l’estranya roba de les paràboles i el mocador que asseca les portes tancades de la pluja. Tots els dies badallen les ulleres, aquesta agonia que despulla els meus carrers d’analfabeta. El clam llepa les meues temples buides, mentre la nit crivella el relleu del teu melic en el pessebre de la Nit de Nadal.

Poema d’ANDRÉ CRUCHAGA traduït en català per PERE BESSÓ




SIN BRÚJULA




Ahora sangran su infortunada noche las distancias: la palabra afiebrada del sollozo abre su redondo pez de grito. En la carne, la extraña ropa de las parábolas y el pañuelo que seca las puertas cerradas de la lluvia. Todos los días bostezan las ojeras, esta agonía que desnuda mis calles de analfabeta. El clamor lame mis sienes vacías, mientras la noche acribilla el relieve de tu ombligo en el pesebre de Nochebuena.
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Del libro: “Antípodas del espejo”, 2018
©André Cruchaga

domingo, 23 de diciembre de 2018

HERÈNCIA

(C) Pintura Alexey Rychkov





HERÈNCIA




Lluny ja del coàgul de l’eclipsi, no calen més seguicis, ni èxodes. —Em basta el beuratge heretat i l’escapulari d’escarn i dol al voltant del meu coll.

Poema d’ANDRÉ CRUCHAGA traduït en català per PERE BESSÓ




HERENCIA




Lejos ya del coágulo del eclipse, no hacen falta más cortejos, ni éxodos. —Me es suficiente el brebaje heredado y el escapulario de escarnio y luto alrededor de mi cuello.
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Del libro: “Antípodas del espejo”, 2018
©André Cruchaga
© Pintura Alexey Rychkov

CUERVO IMPOSIBLE






CUERVO IMPOSIBLE





      Cuando un poeta utiliza leyes, costumbres y tradiciones milenarias para poner título a sus libros como: “Ars Morendi” (el arte del bien morir), uno se extraña que el título siguiente sea “Cuervo imposible”. Huguín y Munin, cuervos asociados con el dios Odín de la mitología nórdica (dios de la sabiduría, guerra y muerte; dios de la magia, poesía, victoria y caza) Este poeta le roba los cuervos al mencionado dios de la mitología para darnos un novedoso y escalofriante título de su último libro, donde transfigura con su gran capacidad, el lenguaje de sus antecesores y contemporáneos; imágenes y metáforas que el poeta transformó  en su estilo de vida y escritura.
      La escritura de André Cruchaga, para mí, y muchos otros poetas es una de las más representativas poéticas centroamericanas en la actualidad. Tiene la genialidad de los consagrados, de expresión combativa y múltiples añoranzas. El acto de creación: el deseo de inventar la aproximación más delicada a la materia erótica (unas veces), pues en ella está la génesis de todas las cosas. En otros textos, el escenario es diferente: transgrede los absolutos y desazones de la vida cotidiana. Su poesía no tiene  diferencias respecto de los grandes del Surrrealismo como, René Char u otros exponentes de dicho ismo, (No en su acorde, sí en contenido). Sus poemas poseen múltiples aristas para su interpretación, (propias de su estilo) que nos llevan el aliento con el suyo a un asentimiento de su conjunto expresivo y vital…La fatalidad siempre está ahí, y, a menudo, lo lleva a estados de implenitud.
      Muchos son los comentaristas que se encaprichan en el decir de los poetas latinoamericanos que se arrastran tras las letras europeas. Lamentablemente en algunos aspectos es así; larga es la lista de poetas de este nuevo continente, que fueron y son geniales precursores de movimientos poéticos; algunos poetas de este nuevo mundo como Vicente García Huidobro padre del Creacionismo (teoría estética general). Fue el primer movimiento de vanguardia nacido en Latinoamérica (antropológico y humanista) que arrastró y dictó pautas a los poetas extranjeros de muchas campanillas.
      Basta leer un poema Cruchaguiano para aquilatarlo de gran voz innovadora, de un misterio de otredad ante la extraña presencia de sentimientos profundos, que estremecen al lector.  Este poeta podríamos decir que tiene semejanza con el poeta chileno Huidobro que movió, ya lo dije, los cimientos de la poesía europea. También podemos advertir las influencias que el poeta ha tenido en especial de la poesía surrealista francesa, pero su entraña poética ha sido potenciada por lo latinoamericano.  Es una de las voces más prolíficas de la poesía salvadoreña.
      André Cruchaga presenta en este libro que nos ocupa un lenguaje más apacible, repleto de añoranzas donde destaca el recuerdo de: “vos y yo” recurso que florece como las rosas en mi jardín donde se enquista el alma dolorida del poeta. “Vos y Yo” van juntos pero respiran diferentes aires  de desesperanzas, ausencias, lejanías; en ese “Vos y  Yo”,  participan los imborrables recuerdos de dulzuras y llamas; el poeta es “Un hombre en llamas” por ello su lectura–escritura va  saturada de emoción y rebeldía. Su poesía es huérfana y dolorosa, de aflicciones que a la postre le resultan en fertilizantes para su trabajo de hondura y de envidiable fecundidad. En la escritura de André Cruchaga, por lo demás, reaparece —insisto— la carga significativa de los elementos asociados a la angustia desde el yo experiencial, a veces por la incertidumbre y el descreimiento.
      Él es un creador incansable, se vuelve mago insustituible destejiendo atmósferas por entre la trama del cosmos, va a la vanguardia de muchos poetas. Es, sin duda, de personalidad introvertida. La obra poética de Cruchaga es sustancial y coherente, difícil a veces de comprender por el fondo y trasfondo de su ser: deviene de sus propias conmociones.
      “La obra Cruchaguiana”,  nació y se hizo con él y se me antoja hablar de los poemas contenidos  en este maravilloso libro que podría ser un “cuervo Blanco” (si hubiese uno)… donde  no sólo ronden los rumbos vitales del hombre, sino la creación artística del decir que camina hacia lo oculto e inesperado en un ritmo de trabajo intelectual activo, ávido lector de clásicos y folletines, de  movimientos poéticos, revistas, periódicos, etc., a través del tiempo; por ello, sus poemas acusan épocas de crisis, o estancamiento, de soledad y evocación, de improviso el poeta se siente huérfano  de humanidad y lo inunda la melancolía.  Como en su juventud, lleva la llama del camino de ese cuerpo suyo que nació con la vitalidad de la hierba y se abre al mundo de los poetas. Entran por sus sagaces pupilas, escritores, poetas, filósofos, filólogos, filántropos, entre tantos sabios…
      El desasosiego erótico toca su corazón de tiempos pasados y en el presente conserva ese impulso, quemándose cada vez en el fuego que lo calcina, “el desnudo de una mujer, dice, es la más estimulante, bella, incomparable escultura de toda la humanidad”… pero ojo, André Cruchaga, es  poeta de compromiso por la palabra y testimonio de sus múltiples y a menudo caóticas vivencias, su imaginación desbordante y espíritu le agitan las neuronas hasta estallar y transgredir al límite la palabra; esa pasión por la vida que lo quema, lo lleva una y otra vez fuera de la tierra y lo hace revivir como el ave Fénix. “Toda cosa no es sino el límite de la flama a la cual debe su existencia”. Esa llama objetiva, ese fuego, factor único de inspiración, trabajo y creatividad.
      Emocionantes recitaciones de sus poemas le llegan de diferentes partes del mundo con voces contemporáneas y de antaño que le quitan la respiración, e inesperadamente, con ellas deviene el sueño y ensueño, con el reiterado dejo de la pasión que le quita el peso de la orfandad. De nuevo la luna y su brillo, otra vez la desnudez y el milagro de Dios en su belleza, el poeta desde su memoria, cabalga muchos itinerarios, se baña en las tempestades, se olvida de todo, se rapa, expande el suspiro y escribe, sin cansancio, como escriben los poetas… ¡A Dios Gracias!...
      Buena parte de los poemas de André Cruchaga son de una belleza apesadumbrada, se desenvuelve entre prosa-verso. Él lleva la exaltación de sus noches de ensueño y sobresalto. Maestro de universidad y profesor rural en los inicios del ejercicio de la docencia. Su obra arrostra esa opaca luz de la patria que se desangra en medio de tanta violencia, dramática oscuridad por sus calles vencidas. Su corazón va herido, él cruza con zapatos de clavos y los malolientes pantanos de la desesperanza: la tierra desolada de su infancia y de toda una vida. Se puede escuchar a menudo al yermo labrador acuciado por la hambruna. Entra a la caverna y sale ileso, febril, insaciable, luminoso, porque sus extravíos son misterio.
      La cosmogonía de André Cruchaga gravita en un escenario de pesimismo existencial, extremadamente agobiante. Su poesía, parte en verso; otra en prosa, nos acerca a lo cíclico, es decir, que a través del texto poético-narrativo, (polifonía, espiral, voces, ecos, diálogo, monólogo), nos conduce a escenarios insólitos de su origen, al tiempo. Lo erótico-amoroso es sólo un recurso para darle rienda suelta a sus pulsiones y a los entramados del discurso poético.
      André Cruchaga, pues, trasciende la palabra con sus desasosiegos. Su orfandad se asemeja con el grito de la humanidad: su poesía es toda una experiencia de vida trágica, predestinada, sí, a trascender en medio de las miserias del mundo. Pero, contra todo fatalismo está la Esperanza y el fogón de su escritura.



Elena Muñoz de Latorre
Escritora chilena.
Licenciada en Filosofía, Historia Literatura.
Universidad de Concepción, Chile


sábado, 22 de diciembre de 2018

PROCACITAT

Imagen FB de Pere Bessó





PROCACITAT




Sempre fou procaç la pluja damunt del cos dels fèretres: enmig dels jocs del pecat, la sedició total dels àngels i la ceguesa urgent d’entrar a la caverna. Al tall de la gola els manuscrits líquids de la brasa en el gaudi de les devastacions. (Ens queda, per si de cas, la previsible ratxa de paraules en el confessionari del rellotge convertit en minut. La resta li la deixem a la sobretaula de les temptacions o a la simple agenda del demà.)

Poema d’ANDRÉ CRUCHAGA traduït en català per PERE BESSÓ





PROCACIDAD




Siempre fue procaz la lluvia sobre el cuerpo de los féretros: en medio de los juegos del pecado, la sedición total de los ángeles y la ceguera urgente de entrar a la caverna. Al filo de la garganta los manuscritos líquidos de la brasa en el goce de las devastaciones. (Nos queda, por si acaso, la previsible racha de palabras en el confesionario del reloj convertido en minuto. Lo demás se lo dejamos a la sobremesa de las tentaciones o a la simple agenda del mañana.)

Del libro: “Antípodas del espejo”, 2018
©André Cruchaga

DESCONCERT


Imagen FB de Pere Bessó






DESCONCERT




També hi ha sudaris de sabates que es nodreixen de paciència i boques de peixos amb la bava dels trossejadors. De l’arpó de l’alba, les varices del desànim sabent de la fatiga de les parpelles. Bull l’abisme en la seua voluntat cega: sempre estem destinats a cabines d’autopsia o l’utilitarisme repulsiu de la plusvàlua. (Ara ens ofeguem en la carronya de l’ambigüitat, fins al punt de tornar-nos pòstums en les entranyes dels zopilots.) Per quan recordarem les funeràries, serà impossible el rictus de la pluja damunt de la vellositat panteixant del cap de carrer.

Poema d’ANDRÉ CRUCHAGA traduït en català per PERE BESSÓ





DESCONCIERTO




También hay sudarios de zapatos que se nutren de paciencia y bocas de peces con la baba de los destazaderos. Del arpón del alba, las varices del desaliento sabiendo de la fatiga de los párpados. Hierve el abismo en su voluntad ciega: siempre estamos destinados a camarotes de autopsia o al utilitarismo repulsivo de la plusvalía. (Ahora nos ahogamos en la carroña de la ambigüedad, al punto de volvernos póstumos en las entrañas de los zopilotes.) Para cuando recordemos las funerarias, será imposible el rictus de la lluvia sobre la vellosidad jadeante de la bocacalle.

Del libro: “Antípodas del espejo”, 2018
©André Cruchaga

viernes, 21 de diciembre de 2018

MITOLOGIA

Imagen FB de Pere Bessó





MITOLOGIA




Ignore si era orfandat buscar el teu cos diàfan: ací per W. Roseburn avenue, el fred compartit. Damunt de la sang de tardor els canelobres grisos dels arbres i el desig allargat amb els seus dits de guspira. Era abisme aquell ventet en el cos? Per cert, damunt d’aquestes armadures d’asfalt, la tortura del basalt gemegant del teu sexe. Després hem buscat una eixida a aquest foc: en la consciència, només les velles bigues de la mitologia trasbalsada.

Poema d'ANDRÉ CRUCHAGA traduït en català per PERE BESSÓ





MITOLOGÍA




Ignoro si era orfandad buscar tu cuerpo diáfano: ahí por W. Roseburn avenue, el frío compartido. Sobre la sangre de otoño los candelabros grises de los árboles y el deseo alargado con sus dedos de centella. ¿Era abismo aquel vientecillo en el cuerpo? Por cierto, sobre estas armaduras de asfalto, la tortura del basalto gimiente de tu sexo. Después hemos buscado una salida mística a este fuego: en la conciencia, sólo los viejas vigas de la mitología trasegada.

Del libro: “Antípodas del espejo”, 2018
©André Cruchaga

WHITMORE AVENUE

Imagen FB de Pere Bessó





WHITMORE AVENUE




Plovia com mor la música en els ossos: un blues remot grinyolava al lluny en el desvetllament rovellat de les temples. Ningú més no veia, supose, la foscor cremada del miratge, els promontoris de formigues en el paisatge i les pors a desenterrar els tiliches del subsòl. Així es mantingué èbria i ferida l’engonal, expectant en l’irreal de la nuesa. (Després de tant degoteig, és clar, el silenci de reüll tancà els ulls mentre s’entumien a perpetuïtat els gemecs. En l’espill de semen damunt de la tardor, la taca de sal com un film negre.)

Poema d’ANDRÉ CRUCHAGA traduït en català per PERE BESSÓ




WHITMORE AVENUE




Llovía como muere la música en los huesos: un blues lejano rechinaba a los lejos en el desvelo oxidado de las sienes. Nadie más veía, supongo, la oscuridad quemada del espejismo, los promontorios de hormigas en el paisaje y los miedos a desenterrar los tiliches del subsuelo. Así se mantuvo ebrias y heridas la ingle, expectante en lo irreal de la desnudez. (Después de tanto gotear, claro, el silencio de soslayo cerró los ojos mientras se entumecían a perpetuidad los gemidos. En el espejo de semen sobre el otoño, la mancha de sal como un filme negro.)

Del libro: “Antípodas del espejo”, 2018
©André Cruchaga

PRECIPITACIÓ

Imagen FB de Pere Bessó





PRECIPITACIÓ




Ofeguen la respiració aquestes aigües de la pulsió quan entre al suburbi cardinal de les illades. Repte a les fosques damunt de l’ombra de la gespa: ací s’estimba la sang i esculpeix el rellotge les seues hores d’argent viu. S’afona el cel en l’estany del sexe i clava el somni les seues esferes de viatger. Trencat el pit, el braser de l’altar és boca profanada, voraç i descomunal el desvari. També és cruel aquest joc quan s’esdevé la desolació i la tristesa. (En tot hi ha una memòria tardívola als ulls, fossa la rosa retallada de la pressa. Després, la falda sense trens i el cadàver groc de les flassades. De vegades només l’oblit i el seu obstinat part. O alguna turbulència en l’estiatge de l’entrecella.)

Poema d’ANDRÉ CRUCHAGA traduït en català per PERE BESSÓ






PRECIPITACIÓN




Ahogan la respiración estas aguas de la pulsión cuando entro al suburbio cardinal de los ijares. Repto a oscuras sobre la sombra del césped: ahí se despeña la sangre y esculpe el reloj sus horas de azogue. Se hunde el cielo en el lago del sexo y clava el sueño sus esferas de viajero. Roto el pecho, el brasero del altar es boca profanada, voraz y descomunal el desvarío. También es cruel este juego cuando deviene la desolación y la tristeza. (En todo hay una memoria tardía en los ojos, fosa la rosa cercenada del apremio. Después, el regazo sin trenes y el cadáver amarillo de las cobijas. A veces sólo el olvido y su obstinado parto. O alguna turbulencia en el estiaje del entrecejo.)
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Del libro: “Antípodas del espejo”, 2018
©André Cruchaga

jueves, 20 de diciembre de 2018

ABEURADOR

Imagen FB de Pere Bessó






ABEURADOR




Fins a les parpelles, La picada de ganivets de la boira, o el suïcidi fins al coll de tots els silencis: a punt d’incinerar els meus batecs, el peix de sal en les finestres de la cara. Amb els braços mossegats pel fred, em recline en l’horitzó fumat de les andanes. Volen grisos els espills de la son i la cicatriu ennassada de tantes ferides. Brama ensangonada la boira de la fullaraca, mentre el xiprer em dóna l’esquena perquè descanse la meua angoixa. (Ja tan cert el miratge, és rabent l’abeurador als molls: tota vaguetat resta dissolta com els transeünts a l’hora nona).

Poema d’ANDRÉ CRUCHAGA traduït en català per PERE BESSÓ




ABREVADERO




Hasta los párpados, el picotazo de cuchillos de la niebla, o el suicidio hasta el cuello de todos los silencios: a punto de incinerar mis pálpitos, el pez de sal en las ventanas de la cara. Con los brazos mordidos por el frío, me reclino en el horizonte ahumado de los andenes. Vuelan grises los espejos del sueño y la cicatriz gangosa de tantas heridas. Brama ensangrentada la bruma de la hojarasca, mientras el ciprés me da su espalda para que descanse mi congoja. (Ya tan cierto el espejismo, es raudo el abrevadero en los muelles: toda vaguedad queda disuelta como los transeúntes a la hora nona).

Del libro: “Antípodas del espejo”, 2018
©André Cruchaga

PARADISE ROAD


Imagen FB de Pere Bessó





PARADISE ROAD




De les seues nits als molls de la fam, només resta el corc i aquella memòria dels buits embriagadors. Damunt de les andanes de Paradise road, els ocells mossegaven les aixelles de la misèria i també les branques de l’horitzó enredades en la fullaraca de l’alé. (El fred mossegava a crits les nostres ombres mentre l’hivern empal·lidia a la boca amb la seua fusteria sargida de desraons.)

Poema d’ANDRÉ CRUCHAGA traduït en català per PERE BESSÓ





PARADISE ROAD




De sus noches en los muelles del hambre, sólo queda la carcoma y aquella memoria de los vacíos embriagantes. Encima de los andenes de Paradise road, los pájaros mordían las axilas de la miseria y también las ramas del horizonte enredadas en la hojarasca del aliento. (El frío mordía a gritos nuestras sombras mientras el invierno palidecía en la boca con su carpintería zurcida de sinrazones.)

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Del libro: “Antípodas del espejo”, 2018
©André Cruchaga

miércoles, 19 de diciembre de 2018

AMFITEATRE

Imagen FB de Pere Bessó






AMFITEATRE




Al rostre de fum de la boira l’única substància perceptible en la gola és el ganivet que la tenalla. Cap a les solapes del presagi, els posats grisos de l’avenir i les esquenes ràncies de tants cementiris. No hi ha, per cert, darrera estació en la pols que es desborda en la memòria, sinó una infinitat de portes xifrades i amulets.Tampoc n’hi ha en la precarietat d’un escapulari que ha acumulat totes les credencials de la nit. (De sobte m’és prou el suc de saliva propi del sopor dels amfiteatres. Resulta evident dins de l’ull, el cadàver de la desmemòria al costat del tossut sexe de lava de la pedra espenyada del panteix.) El buit, il·lés, és tot el que em sobreviu.

Poema d’ANDRÉ CRUCHAGA traduït en català per PERE BESSÓ




ANFITEATRO




En el rostro de humo de la niebla la única sustancia perceptible en la garganta es el cuchillo que atenaza la garganta. Hacia las solapas del presagio, los ademanes grises del porvenir y las espaldas rancias de tantos cementerios. No hay, por cierto, última estación en el polvo que se desborda en la memoria, sino un sinfín de puertas cifradas y amuletos. Tampoco la hay en la precariedad de un escapulario que ha acumulado todas las credenciales de la noche. (De repente me es suficiente el zumo de saliva propio del sopor de los anfiteatros. Resulta evidente dentro del ojo, el cadáver de la desmemoria junto al terco sexo de lava de la piedra despeñada del jadeo.) El vacío, ileso, es todo lo que me sobrevive.

Del libro: “Antípodas del espejo”, 2018
©André Cruchaga