viernes, 9 de marzo de 2012

BLUES/BLUES. COMENTARIO Y TRADUCCIÓN DE PERE BESSÓ

Imagen tomada de chicagobluesbar.com




BLUES/BLUES. COMENTARIO Y TRADUCCIÓN DE PERE BESSÓ



Querido André.


Ya hacía días que no te leía otro texto de parecida factura, un gran pequeño poema en prosa. Y, quizás, el título sólo le haga justicia en parte. Al fin y a la postre todo el mundo conoce bien la estructura rítmica del blues y, más allá de la forma, el 'sentido' de tal sentimiento -feeling-. A poco que el lector/la lectora se deje llevar por la atmósfera del texto, sí podrá, si lo desea, encontrar las claves del blues más duro: sin duda Tom Waits, Ottis Span, Memphis Slim, John Lee Hooker y tantos padres -y tantas madres (Mahalia Jackson)- nos han ido marcando la autopsia de la calle en vagabundeo, el tabaco y el alcohol -one bourbon, one scotch and one beer- el sexo tristón y hasta abominable, la llegada del alba, casi siempre tormentosa (más si es lunes: stormy monday blues), miseria, explotación, sueños brumosos, entre simbólicas referencias más que comprensibles: tarántulas, corona de espinas...

Pero el poema es mucho más, aunque exceda de esta leve apuntación, convendría hacer alguna referencia al juego de las comparaciones y metáforas. Sólo citaré por esta noche el contraste que supone pozo, mirada y alba ensartados por la connotación del negro:

...oigo voces en el pozo negro de las sombras: ceniceros de colillas enredados en el espejismo de las palabras, en la sal orgásmica y a veces, abominable. Siempre el alba es negra como los merodeadores de los sueños, como la justicia sorda en un campo minado, como las almádanas aplastando el aliento. Entre paredes de musgo y arcilla, el fondo negro de las miradas del absurdo...

Acaso tenga tu poema alma de blues. Mi felicitación, amigo Cruchaga.

Pere Bessó



BLUES



Carrers embriacs de fustes grogues, bicicletes i boines migratòries. Al tabal del temps, vagaregen rellotges de tabac i melòdiques amb ocells moribunds. Hi ha nàusees en les mirades de suc de canya dolça de l'entrecella, arnesos a la carta dels vitrals desfonats del cantó enfilat al llenguatge; sent veus al pou negre de les ombres: cendrers de burilles enredrades al miratge dels mots, en la sal orgàsmica i, de vegades, abominable. L'alba sempre és negra com els saltamarges dels somnis, com la justícia sorda en un camp minat, com els malls esclafant l'alé. Entre parets de molsa i argila, el fons negre de les mirades de l'absurd: la nit prou incerta de la perpetuïtat, aventa caps damunt dels hivernacles fèrtils de l'explotació. Oneja el fullatge la seua misèria d'anyil, la llibertat amagada als baguls dels trens, bufen els capells safareigs de sang, l'absurd es debat enmig de somnis i ventalls de boira espesseïda. Quan la nit cau són meravelloses les plantades i els jardins, el ferro del forcat, del carbó i els gossos; cada dia les mans muden cascavells, continua ací, a l'empara de la nit, el ball fosc de les taràntules i la corona d'espines obrint les temples.


Baratària, 06.III.2012





BLUES





Calles embriagadas de maderas amarillas, bicicletas y boinas migratorias. En el tambor del tiempo, deambulan relojes de tabaco y melódicas con pájaros moribundos. Hay náuseas en las miradas guarapas del entrecejo, arneses a la carta de los vitrales desfondados de la esquina ensartada en el lenguaje; oigo voces en el pozo negro de las sombras: ceniceros de colillas enredados en el espejismo de las palabras, en la sal orgásmica y a veces, abominable. Siempre el alba es negra como los merodeadores de los sueños, como la justicia sorda en un campo minado, como las almádanas aplastando el aliento. Entre paredes de musgo y arcilla, el fondo negro de las miradas del absurdo: la noche bastante incierta de la perpetuidad, avienta cabezas sobre los invernaderos fértiles de la explotación. Ondula el follaje su miseria de índigo, la libertad escondida en los baúles de los trenes, soplan los sombreros charcos de sangre, el absurdo se debate entre sueños y abanicos de espesa niebla. Cuando la noche cae son maravillosas las plantaciones y los jardines, el fierro del arado, del carbón y los perros; cada día las manos mudan cascabeles, sigue aquí, al amparo de la noche, el baile oscuro de las tarántulas y la corona de espinas abriendo las sienes.

Barataria, 06.III.2012