martes, 6 de abril de 2021

RECOMPTE DEL REFILET AL BOSC│ RECUENTO DEL TRINO EN EL BOSQUE

Imagen FB de Pere Bessó




RECOMPTE DEL REFILET AL BOSC

 

 

Hoy estoy perplejo, como quien pensó y encontró y olvidó,

hoy estoy dividido entre la lealtad que debo

a la Tabaquería del otro lado de la calle, como cosa real por fuera,

y la sensación de que todo es sueño, como cosa real por dentro.

Fernando Pessoa

 

 

Al temps del recompte del refilet al bosc, el parrac de l’alè

a les branques de la vida: en realitat, l’ull s’estremeix

davant dels traços tatuats a la pell; ixen pertot venes

endolades amb els seus alts i baixos d’imperatius barrets de somnis.

Mai no oblide el joc edènic d’allò temporal, aquesta sensació de levitar

en el desig, el niu maltractat en l’esperpent, aquesta bogeria

dubitativa de normalitat desdoblada i aparent i trencada que traspassa

ulls, malmesa de roba com l’esperança que s’invoca.

La perplexitat traspunta els seus mussols demencials, bars, carrers, dins

d’aquesta pell trencada en la seua violenta nuesa de món brut i tèrbol.

El somni és només un consol per a suportar els taüts de cada dia.

I és normal dubtar de l’amor mentre les parets reals,

siguen preludi de l’erosió i agonia de la bellesa.

L’únic real, supose, aquest afeixugament d’hímens trencats gemegant

damunt dels estatuts de fel de la història viscuts a pols.

Sempre ens toca anar de tomb en tomb avançant-nos a portes

d’estranys vols i a crims buidats en el nostre alè.

.

. Poema d’ANDRÉ CRUCHAGA traduït en català per PERE BESSÓ

.

 

RECUENTO DEL TRINO EN EL BOSQUE

 

 

Hoy estoy perplejo, como quien pensó y encontró y olvidó,

hoy estoy dividido entre la lealtad que debo

a la Tabaquería del otro lado de la calle, como cosa real por fuera,

y la sensación de que todo es sueño, como cosa real por dentro.

Fernando Pessoa

 

 

Al tiempo del recuento del trino en el bosque, el andrajo del aliento

sobre las ramas de la vida: en realidad, el ojo se estremece

frente a los trazos tatuados sobre la piel; salen por doquier venas

enlutadas con sus altibajos de imperativos sombreros de sueños.

Nunca olvido el juego edénico de lo temporal, esa sensación de levitar

en el deseo, el nido maltratado en el esperpento, esta locura

dubitativa de normalidad desdoblada y aparente y rota que traspasa

ojos, maltrecha de ropa como la esperanza que se invoca.

La perplejidad asoma sus búhos demenciales, bares, calles, adentro

de esta piel rota en su violenta desnudez de mundo sucio y turbio.

El sueño es solo un consuelo para soportar los ataúdes de todos los días.

Y es normal dudar del amor mientras las paredes reales,

sean preludio de la erosión y agonía de la belleza.

Lo único real, supongo, este agobio de hímenes rotos gimiendo

sobre los estatutos de hiel de la historia vividos a pulso.

Siempre nos toca ir de tumbo en tumbo anticipándonos a puertas

de extraños vuelos y a crímenes vaciados en nuestro aliento.

.

Del libro: ‘Fuego de llaves invisibles’, 2021

©André Cruchaga



 

No hay comentarios: